15 de octubre de 2025, Día Internacional de la Mujer Rural
Por Diego Mora, Hivos Ecuador
Imagina despertar al amanecer con el canto del Jocotoco, el aroma húmedo de la tierra fértil y el murmullo del río Numbala que da vida a tu hogar. Esa es la rutina de miles de mujeres en la Amazonía ecuatoriana, como Camila, joven productora ganadera de la parroquia Valladolid, en Zamora Chinchipe. Cada día, junto a sus padres, cuida su finca como a un hijo: ordeña sus vacas, siembra café y cultiva árboles frutales y forestales. Su trabajo no solo alimenta a su familia, sino que regenera la biodiversidad local amenazada por el cambio climático. Si alguna vez has caminado por un bosque o probado un fruto silvestre, probablemente has sentido el cuidado invisible de estas mujeres en cada paso y cada bocado. Hoy, en el Día Internacional de la Mujer Rural, celebramos esa fuerza silenciosa pero indispensable que mantiene con vida al Ecuador y al planeta.

En la Amazonía —el pulmón del mundo— las mujeres indígenas y rurales son verdaderas arquitectas de la sostenibilidad. Representan casi la mitad de la población rural del país y producen más del 60% de los alimentos que llegan a nuestras mesas, según la FAO. Sin embargo, detrás de esta abundancia persisten las brechas: más del 35% vive en pobreza (el doble del promedio nacional) y solo una de cada ocho tiene tierras agrícolas a su nombre. Estas mujeres trabajan, en promedio, 23 horas más por semana que los hombres, según el INEC, muchas veces sin acceso a crédito, ni representación en las decisiones que afectan su territorio. Y, aun así, no se rinden.
Con saberes ancestrales y prácticas bioculturales, rotan cultivos, cuidan semillas y regeneran suelos agotados, protegiendo especies nativas como la pituca y el guabo, esenciales para la selva. En Hivos creemos que cuidar la biodiversidad es un acto de amor colectivo, y las mujeres amazónicas lo encarnan cada día. A través de programas como Futuros Urbanos, Restauración Biocultural y Productiva en Zamora Chinchipe o la Ruta de la Salud Indígena Amazónica y Cambio Climático, Hivos apoya a comunidades de Ecuador, Brasil y Colombia para restaurar el equilibrio entre salud, espiritualidad y naturaleza.
Junto a nuestras aliadas, impulsamos emprendimientos regenerativos: mujeres afrodescendientes que recolectan concha de forma sostenible; artesanas y cocineras de la Asociación Nua Kakaram que han pasado de la invisibilidad al liderazgo; y huertos comunitarios que diversifican la selva y fortalecen la soberanía alimentaria. Estas iniciativas no solo generan ingresos, sino que regeneran la vida: reducen la pobreza, combaten la desnutrición infantil —que aún afecta al 27% de niños menores de dos años— y mitigan el cambio climático al plantar miles de árboles nativos.
Pero el cambio real también nace de nosotrxs. Desde Quito, Guayaquil o cualquier ciudad del mundo, podemos unirnos a su causa: consumiendo responsablemente, apoyando iniciativas locales y exigiendo equidad de género en los territorios. En este 2025, con Beijing+30 en el horizonte, es momento de que sus voces guíen la agenda global: más acceso a la tierra, la educación y el financiamiento. Solo así el cuidado será equidad y la regeneración, herencia para todas y todos.
Mujeres rurales: son el corazón verde de Ecuador y del mundo. ¿Cuál es tu compromiso por ellas?
