La comida puede ser la solución

junio 18, 2019

Por Frank Mechielsen

Cada día, 20 billones de platos son preparados en este mundo: comidas preparadas por cocineros y cocineras en casas, oficinas, escuelas, restaurantes o fábricas que se dedican a hacer comida precalentada para supermercados y puestos de comida en la calle.

Amo la comida y amo cocinar, pero este acto se ha vuelto cada vez más raro en nuestras ocupadas vidas; nuestra alimentación está bajo riesgo por el cambio climático y la contaminación ambiental. Además, la comida está en el centro de una crisis de salud global: la mitad de la población está enferma –o se enfermará- debido a la desnutrición o la obesidad (OMS).

“La comida puede solucionarlo” fue el mantra del Foro EAT de la semana pasada. Más de mil líderes y lideresas de la alimentación de todo el mundo se reunieron para intercambiar experiencias y desarrollar alternativas a nuestros sistemas alimentarios actuales, con el objetivo de que podamos producir comidas saludables, asegurar que productoras y productoras ganen un salario decente y evitar “sobrecalentar” el planeta.

Democratizar la buena comida

Más de ochenta personas estaban en pie a las siete de la mañana para acompañarnos en nuestro evento paralelo. El tema fue: ¿Cómo puede la gastronomía aportar en la popularización de la comida saludable y amigable con el medio ambiente? Hivos organizó este evento junto con el Nordic Food Policy Lab, WWF, IFOAM, Slow Food y Ethos Mexico.

Las personas pioneras de la alimentación saludable de MIGA Bolivia, Slow Food South Africa y la New Generation of Indonesian Cooking presentaron sus soluciones y lecciones. Escuchamos sobre iniciativas emergentes como el Plan Nacional de Gastronomía Saludable y Sostenible de Costa rica y el Manifesto de la Nueva Alimentación de la Cocina Nórdica (New Nordic Kitchen Manifesto). Además, presentamos un mapeo global de más de 100 iniciativas gastronómicas.

Concluimos que el gusto puede llevar a la transformación. Sin embargo, la conveniencia, los aspectos sociales y el precio son también importantes. Si atendemos estos temas, el cambio puede normalizarse a través de rituales culinarios diarios.

Los movimientos de alimentación pueden liderar la transformación, impulsados por chefs con -cada vez más- involucramiento social. En el Foro EAT explicaron cómo ellos y ellas pueden motivar a las personas consumidoras, influenciar políticas alimentarias y lograr que las compañías de alimentación adopten su soluciones saludables.

Participantes del Foro EAT

Ingredientes principales para llevar a casa

Revitalización de la cocina

Esto ayudará a las personas consumidoras a reconectarse con su cultura culinaria y revalorar cómo es producida la comida. Sin embargo, la cocina no es la única solución. Necesitamos promover la alimentación saludable, asequible y reconfortante también. Por eso, nuestro socio MIGA Bolivia trabaja con vendedoras de comida (caseras) para apoyarles en la preparación de platos con ingredientes locales y diversos.

Es también fundamental traer a las grandes corporaciones de comida a la mesa. Por ejemplo, el Fondo World Wildlife trabajó con KNORR (Unilever) en el reporte de los 50 Alimentos del Futuro, una colección global de comida hecha a base de plantas que pueden levantar el valor nutricional de nuestros platos mientras reducimos su impacto ambiental.

Juventud

En todo el mundo, los niños y las niñas están marchando para crear consciencia sobre el cambio climático y están demandando acción real. Los movimientos de jóvenes son motores poderosos de cambio.

En el Foro EAT escuchamos muchos ejemplos sobre programas de educación alimentaria que (re)conectan a la niñez con la comida a través de huertas y cantinas escolares saludables; una iniciativa que los gobiernos deben apoyar mientras aseguran que las compras públicas sean de producción local, diversa y saludable.

Plataformas fuertes

Escuchemos a las autoridades locales, a las personas productoras, al gremio empresarial, a los y las chefs y a la niñez que protesta. Es necesario aumentar la colaboración para encontrar soluciones locales.

Tomemos el ejemplo de Bandung, Indonesia, donde chefs, restaurantes, vendedores y vendedoras, oficiales de gobierno y sociedad civil se unieron y lanzaron la iniciativa New Generation of Indonesian Cooking, la cual promueve comida asequible, deliciosa y saludable producida de forma sostenible, mientras presenta una versión moderna de la rica herencia gastronómica nacional.

Si solucionamos nuestro sistema alimentario, podemos atender muchos problemas relacionados con la salud, el medio ambiente y nuestro planeta.

 

Frank Mechielsen, Senior Advocacy Officer for Sustainable Food at Hivos
Frank Mechielsen, oficial de incidencia de Alimentos Sostenibles en Hivos.

 

Subsidios para la comida saludable

Las políticas gubernamentales deben ser transformadas. Actualmente, muchos gobiernos subsidian monocultivos o importan comida de baja calidad. En vez, ¡deberían estar subsidiando comida nutritiva, diversa y de producción local! Esto es fundamental no sólo para evitar consecuencias negativas en nuestra salud y el medio ambiente y para construir sistemas alimentarios saludables y eficientes.

Esto significa agregar el impacto de las emisiones de efecto invernadero, de contaminación de agua y el impacto que esto tiene en nuestra salud a los costos totales de los sistemas de producción. Estamos empezando a ver un cambio en Zambia, donde el gobierno se ha comprometido a reducir la desnutrición por la mitad en la niñez del país para el año 2030. El ministro de Agricultura prometió colocar la agricultura en el centro de los planes gubernamentales para el desarrollo económico y nutritivo.

La comida es un gran conector. Si solucionamos nuestro sistema alimentario, podemos atender muchos problemas relacionados con la salud, el medio ambiente y nuestro planeta. Las personas productoras que cultivan nuestra comida y las consumidoras que la compran y cocinan son los agentes de cambio más importantes.

Por esa razón, desde el programa de Alimentos Sostenibles para Todos y Todas implementado por Hivos e IIED, nos enfocamos en transformar los sistemas alimentarios a nivel local, trabajando con socios, socias y la ciudadanía local. Trabajando juntos y juntas podemos hacer que sus voces sean escuchadas por todas partes, no sólo en eventos. Trabajando juntos y juntas, podemos solucionar la comida.