Por: Giovana Figueiredo y Thais Santos
Preparar a las niñas para ocupar espacios de toma de decisiones es fundamental no solo para la igualdad de género, sino también para la justicia climática. Pero, ¿Cómo conectar la discusión global sobre la crisis climática con el activismo de mujeres en los territorios? ¿Y de qué manera se manifiestan el racismo ambiental y la injusticia climática en lugares como Belém y Río de Janeiro? Estas preguntas fueron centrales en el evento de lanzamiento de la iniciativa «Meninas do Mundo Fazendo Mudanças – MANAS», realizado en Belém do Pará, Brasil.
Hivos América Latina, en colaboración con Mandí, más de 80 personas de diferentes edades, orígenes, géneros y frentes de actuación nos reunimos para conocer el proyecto, que busca crear una red global de niñas comprometidas con la acción climática en Brasil, Uganda, Nepal e Indonesia.
Una de las premisas del programa MANAS es reconocer que, además de ser las primeras y mayores afectadas por la crisis climática, las mujeres y las niñas también son agentes de cambio fundamentales para un mundo más resiliente. Por lo tanto, deben ser fortalecidas para manifestar todo su potencial y liderar acciones climáticas justas en sus territorios. A través de capacitaciones, capital semilla en proyectos e intercambio con niñas de diferentes realidades y países, MANAS preparará a jóvenes mujeres y niñas para participar e incidir efectivamente en instancias locales, nacionales e internacionales relacionadas con el clima.
El evento contó con la presencia de socios estratégicos para la implementación del programa MANAS en Brasil, como Mandí, LabJaca y Plataforma Cipó, además de representantes de movimientos y colectivos locales, líderes comunitarios, organizaciones de la sociedad civil, jóvenes activistas, estudiantes y profesores, y agentes públicos locales. La exdiputada federal y activista Vivi Reis contribuyó al debate y reforzó la urgencia de políticas públicas de educación más eficientes, sobre todo en las regiones periféricas de Belém – las llamadas bajadas.
Analu Benchimol, joven residente de Terra Firme, en Belém, y productora cultural, inspiró al compartir su experiencia como educadora social del Cine Clube TF, un espacio cultural que promueve el liderazgo de jóvenes de la periferia para acciones culturales y artísticas, reafirmando el potencial de transformación social de estos territorios, como bien mencionó Analu. Mariana de Paula, Directora Ejecutiva y cofundadora de LabJaca, habló sobre el trabajo de su organización durante la pandemia en la favela de Jacarezinho, Río de Janeiro, que fue crucial para garantizar el acceso a servicios básicos para la población local. Así, presentó un ejemplo concreto de una organización liderada por mujeres que, desde la favela, piensa soluciones por y para la comunidad.
En los próximos meses, las organizaciones Mandí y LabJaca realizarán la articulación de estos conocimientos a 250 niñas y jóvenes mujeres, así como la divulgación de los próximos pasos del programa Manas y cómo las comunidades de Belém y Río de Janeiro pueden involucrarse en las actividades. ¡Mantente atenta a las redes sociales y sé parte de esta transformación!