Texto por: Andrés Méndez, Oficial de comunicación
Costa Rica pasa la página y finalmente se llena de colores. A partir de mañana, un territorio de apenas 51 mil kilómetros cuadrados y 5 millones de habitantes, ubicado entre Norte y Suramérica se convierte en el país número 29 del mundo que permite el matrimonio entre personas sin distinción de género u orientación sexual. ¡El matrimonio igualitario es realidad en Costa Rica!
Un camino cuesta arriba
Este hito es resultado de un largo proceso que reunió a diversas organizaciones sociales, activistas, personalidades políticas y cientos de costarricenses en una sola lucha. Un camino con batallas legales, discusiones políticas y manifestaciones públicas a lo largo y ancho del país.
Hace 17 años que la primer pareja de hombres gays solicitó la inscripción de su matrimonio, rechazada por el Estado costarricense. Varios intentos similares se dieron posterior a eso, pero muy pocos dieron frutos.
Una sociedad civil organizada
Lo cierto es que la sociedad civil costarricense nunca se quedó de brazos cruzados. Un grupo de organizaciones LGBT y en pro de los Derechos Humanos se juntaron para unir fuerzas. Dando como resultado el Frente por los Derechos Igualitarios (FDI), agrupación a la que Hivos impulsó en sus primeros pasos y con la que trabaja de cerca desde hace ya 4 años en el Programa VIH Costa Rica.
El FDI cambió el rumbo de la discusión sobre Matrimonio Igualitario (MI) en Costa Rica, coincidieron Janekeith Durán, Jota Vargas, Margarita Salas y Michelle Jones, activistas LGBTI e integrantes del Frente desde sus inicios. En momentos en que el Poder Legislativo estaba controlado por fuerzas conservadores, anti derechos y públicamente LGBTI-fóbicas, el Frente impulsó una discusión arriesgada, pero necesaria en materia de Derechos LGBTI.
En el 2013 empezamos la recolección de firmas para presentar x iniciativa popular un proyecto de ley de matrimonio igualitario. Sobró quienes dijeran q no era viable. Para verdades el tiempo, el momento político se crea, entre muchxs, entre todxs. Qué alegría! ? pic.twitter.com/J8niXu2XSv
— Maggie (@maggiewill) May 19, 2020
De ahí que en el 2013 idean la presentación de un proyecto de Ley de MI ante el congreso a través del mecanismo de iniciativa popular. Hivos apoyó el proceso durante casi dos años, sin embargo, el Frente desistió por la dificultad de conseguir las firmas de 175,000 personas. A pesar de que el proceso no concluyó como deseaban, el resultado fue positivo:
“Cuando empezamos, el apoyo de las personas al MI era cero […] conforme conseguimos firmas vimos un avance enorme en la opinión pública a favor de las familias diversas.” Michelle Jones, activista LGBTI
Antes y después de la Opinión Consultiva 24/17
Conforme pasaron los años más protagonistas se unían a la lucha. Ahora era el turno de Ana Helena Chacón, vicepresidenta de Costa Rica en el periodo 2014-18 y aliada de Hivos en la lucha por los derechos de las mujeres trans. Por muchos años la ex Vicepresidenta defendió y abogó por los derechos de la comunidad LGBTI.
En el 2016, Ana Helena se encargó de presentar la Opinión Consultiva 24/17 (OC 24/17) ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos. El recurso preguntaba a la Corte sobre el deber de los estados para asegurar el derecho a la identidad de género y el cambio de nombre de las personas según su género autopercibido, además del reconocimiento legal de las uniones entre parejas del mismo sexo. A todas esas preguntas, en enero de 2018, la Corte IDH dijo sí.
Diez meses después el Poder Judicial costarricense adoptó la OC 24/17 y dió 18 meses para que el Congreso creara y aprobara las modificaciones necesarias para instaurar el MI en el país. A tan solo horas de que se cumpla ese plazo, lo demás ya es historia.
Una lucha constante
Sergio Montealegre encabezó un proyecto de Hivos que surgió gracias al aporte de donantes holandeses. Su equipo analizó el estado del matrimonio entre personas del mismo sexo en cuatro países de América Latina para ver si la sentencia de la Corte en realidad se está cumpliendo.
“Este tema me afecta profundamente, tanto a nivel laboral como a nivel personal. A lo largo de toda la discusión sobre el matrimonio igualitario, el miedo y la homofobia se han intensificado. Mientras nuestro matrimonio no sea oficialmente reconocido, siento que no estoy siendo reconocido oficialmente como ser humano. No tengo los mismos derechos que cualquier otra persona”.
Nueve días después del pronunciamiento de la Corte IDH él y su pareja solicitaron la inscripción de su matrimonio, una vez más. Hoy su felicidad se mezcla con tristeza y dolor, le afectan los mensajes de grupos y personas religiosas fundamentalistas.
“Lo que más duele, es saber que son ataques de personas movidas y adoctrinadas por sus ‘líderes y lideresas’ religiosos/as, [basados] en el odio y no el amor, en la discriminación y no la inclusión”
26 de mayo para nuestra memoria
El 26 de mayo llegó y Costa Rica lo celebra. Esta nación centroamericana se convierte en la séptima de la región, después de Argentina, Brasil, Colombia, México, Uruguay y Ecuador, que reconoce y permite las uniones entre personas del mismo sexo. Ecuador también se valió de la OC 24/17 para alcanzarlo hace menos de un año.
Un logro de este tipo tiene un significado enorme en una región que ha visto morir a más de 1200 personas LGBT por motivo de discriminación entre el 2014 y el 2019. Lo que Costa Rica deja claro es que la lucha es larga y difícil, pero también indispensable.
La OC 24/17 es un instrumento regional del que pueden valerse los 21 países que ratificaron a la Corte IDH en su jurisdicción. Desde su publicación, Hivos trabaja para que El Salvador, Panamá, Perú y Ecuador* ratifiquen sus alcances y reconozcan plenamente los derechos de las personas LGBTI en sus territorios. Pero la lucha no terminará ahí.
Las leyes hacen cambios jurídicos en la sociedad, pero no cambian la mentalidad de las personas.
Sergio Montealegre
Los retos aún son inciertos, lo que sí es claro es que este es un paso para que Latinoamérica y el Caribe eliminen la discriminación por orientación sexual e identidad de género. Como señala Sergio “las leyes hacen cambios jurídicos importantes en la sociedad, pero no necesariamente cambian la mentalidad de las personas. Aún tenemos mucho para trabajar en nuestra sociedad, incluidas las iglesias”.
Por ahora felicitamos y celebramos a Costa Rica por este logro histórico.
¡Hoy es Costa Rica, mañana Latinoamérica!